8 Escritor1 700
  • 17 mayo, 2015
  • Tips

El escribir un libro no es tarea sencilla. Si realmente quieres ser un escritor, entonces debes prepararte para invertir muchas horas de tu tiempo, y de tu vida, en buscar y lograr ideas originales e interesantes de donde puedes partir para lograr tu publicación. Si escribir es lo tuyo, aquí te brindamos estos pasos para que puedas ir en el camino correcto:

Encuentra un tema. No un tema cualquiera, sino uno que te guste, que despierte interés en ti y en un potencial público lector. Uno del que -ojo a esto- seas más que un simple conocedor. Por ejemplo, si ves películas todo el día y te sabes la filmografía de directores, actores y guionistas, sería ideal que tu libro esté relacionado con el cine.

Investiga. Averigua qué libros se han escrito sobre el tema que elegiste, qué dijeron cada uno de ellos y quiénes fueron sus autores. Cuando hayas estudiado la situación, plantéate la siguiente pregunta: ¿puedo aportar algo nuevo a lo que ya está escrito? Si la respuesta es positiva, sigue adelante. Caso contrario, busca otro tema.

Pide opiniones antes. Siempre hay amigos que saben de libros, profesores dispuestos a escuchar y autoridades de la universidad que quieren darte una ayuda para que cumplas tus propósitos. Cuenta con ellos para explicarles tu proyecto y, después de hacerlo, pídeles una opinión sincera. Es bueno que tomes en serio sus consejos, pero recuerda que la persona que escribirá este futuro libro, y quien deba estar más convencido que nadie de su posible realización, eres tú. Si lo sabes, hazlo.

Aprovecha el idioma. El idioma español tiene más de 80 mil palabras, así que no uses siempre las mismas al momento de describir situaciones, objetos, personas, sentimientos, etc. Las palabras que elijas deben calzar perfectamente a tus intenciones y, por nada del mundo, estar puestas solo para rellenar espacio. Créeme, un buen lector se dará cuenta.

¡No te rindas! Querrás eliminar el archivo de Word y dejarlo todo atrás. Estarás tentado más de una vez a olvidarte del proyecto y regresar a tu vida normal, sin presiones ni tareas que tú solito te encomendaste. Pero no lo harás. Algo en ti, si realmente eres un escritor, sabrá que hacer un libro nunca ha sido fácil y que, precisamente, es eso lo que enriquece el proceso. Subir a la cúspide de una montaña no es para los que tiran la toalla.

Lee y relee. La lectura de tus avances es fundamental. De preferencia, hazlo en voz alta, aunque te quedes sin voz pasados unos días (no es broma). La redundancia de algunas palabras, la sonoridad y la musicalización, se evidencian con mayor énfasis si escuchas en repetidas ocasiones lo que has escrito. Otro dato importante es que encuentres a tu libro interesante, muy aparte de tus dotes literarias. Incluso más que saber escribir bonito, lo importante es que tengas algo que decir. Sin contenido, un libro no existe.

Pide opiniones después. Cuando tengas el primer borrador terminado, vuelve donde las personas a las que pediste consejo la primera vez. Ofréceles tiempo para que lean tu trabajo y luego escucha con atención lo que te digan al respecto. Acepta los elogios con prudencia y las críticas con gratitud. Los primeros lectores son básicos para mejorar tu obra. Recuerda que cuando la publicación esté impresa y distribuida en librerías, no podrás cambiarle nada. Simplemente habrá dejado de pertenecerte.

Busca un editor. En el Perú la situación ha mejorado mucho para los escritores noveles. Hay más editoriales que antes (las encuentras hasta por Facebook) y su apertura a nuevos talentos es real y continua. A la aparición de estas llamadas “editoriales independientes”, se suma un mayor interés por parte de los lectores. No creas todo lo que dicen: en este país las personas no solo se dedican a ver televisión, sino que también se dan un tiempo para coger un libro y dejarse llevar entre sus páginas. Ese libro, con esfuerzo y algo de fortuna, puede ser el tuyo.